Nuestra Historia

Los primeros indicios de presencia humana en el municipio se encuentran en Sésamo, donde destacan unas pinturas rupestres en Peña Piñera, consideradas una importante muestra de arte esquemático post-neolítico. Estas pinturas, cuya datación oscila entre el Calcolítico y la Edad de Hierro (5.000 a 2.000 años de antigüedad), refuerzan el valor histórico de la zona.

El castro de Castro Piñera evidencia la presencia de tribus astures, con restos de antiguas fortificaciones.

Durante el periodo romano, se constata actividad en la región, destacando la construcción de un puente datado entre los siglos I y II, coincidiendo con la explotación aurífera en la zona.
La fundación de Vega de Espinareda y de otras localidades del municipio se remonta a la Alta Edad Media, en el marco de las repoblaciones promovidas por la monarquía leonesa tras la creación del reino de León en el año 910.

En este contexto se construyó inicialmente el monasterio de San Andrés de Espinareda, cuya primera mención documentada data del año 923. Fundado por monjes del monasterio de Ageo, en Zamora, siguiendo a San Genadio, este monasterio prosperó gracias a la fertilidad de las tierras del río Cúa y los privilegios concedidos por los monarcas leoneses.
Un devastador incendio destruyó gran parte del monasterio, lo que llevó a varios obispos del reino a colaborar en su reconstrucción.
El rey Alfonso XI otorgó el señorío de Vega al abad de San Andrés.
El abad impulsó la repoblación otorgando cartas de población a nuevos vecinos, garantizándoles tierras y beneficios a cambio de obligaciones.

En el siglo XIV, al amparo de la religión, nace la Feria del Espino, otorgada por Privilegio Real. Es la segunda más antigua de España, con el comercio y el pulpo como protagonistas.
La población de Vega de San Andrés de Espinareda era “de señorío del real monasterio de San Andrés de Espinareda”, perteneciente al mismo y al cual los habitantes debían pagar impuestos y diezmos. El monasterio ejercía poder sobre aproximadamente treinta núcleos, formando parte de su dominio aún en el siglo XVIII.

Durante la Edad Moderna, las localidades de Vega de Espinareda estuvieron bajo la jurisdicción del Adelantamiento del Reino de León.
Tras la reforma administrativa de 1833, las localidades del municipio quedaron integradas en la provincia de León.
La Desamortización de 1836 privó al monasterio de sus tierras, acelerando su abandono, aunque un siglo antes había sido reformado en estilo neoclásico.

El 21 de diciembre de 1973, el municipio del Valle de Finolledo se incorporó al del Vega de Espinareda, conformando el municipio actual, compuesto por 12 pueblos.

El municipio de Vega de Espinareda, enclavado en plena sierra de Ancares, forma parte de la Reserva de la Biosfera de los Ancares Leoneses, reconocimiento otorgado el 27 de octubre de 2006. Este entorno montañoso, surcado por los ríos Cúa, Ancares y Burbia, representa un modelo de equilibrio entre la conservación de la naturaleza y un desarrollo sostenible.